Eres cómo una rosa. La rosa con los tonos más vivos y encantadores del mundo. La más bonita y elegante que se ha visto jamás. Pero tú, al igual que una rosa, tienes espinas. Espinas que no se ven a simple vista, camufladas en la inmensidad de tu belleza. Y cuando me doy cuenta de que detrás de todo, puedo acabar dañado, ya es demasiado tarde. Tus espinas hace tiempo que hirieron lo más profundo de mi corazón. No sangra, pero duele y a demás, me tortura.
sábado, 17 de diciembre de 2011
sábado, 26 de noviembre de 2011
#07 - Pensar...
¿Cuánto tiempo es necesario para olvidar a una persona? Una persona que ya no se acuerda de ti. Que no se preocupa por tu bien estar, que le das igual.
¿Sabes que, pequeña? Me duele pensar que hay otra persona mejor que yo, que te abraza, te besa y pasa su tiempo contigo. Me duele pensar que ésa persona se ha echo con tu corazón mientras yo lo sigo intentando. Me duele pensar que yo sigo lejos de ti, mientras alguien está más cerca de lo que yo nunca podré estar. Me duele pensar que ya no te das la vuelta ni para comprobar que yo sigo aquí, esperándote. No quiero pensar, siempre acabo dañando.
domingo, 6 de noviembre de 2011
#06 - Por ti.
¿Sabes que? No la he llamado. No me intereso por saber nada más de ella. Tampoco quiero que se aburra de mi, como hiciste tu un tiempo atrás. Aún que ya no me veas en ése banco, todavía te estoy esperando. Estoy cambiando. Cuando regrese no seré el mismo. Pero no cambio por ti. Cambio por mi. Por ser alguien mejor y quererte como te mereces.
Hace tiempo que me dicen que andas con alguien. Alguien que no soy yo. Alguien que no me molesto en conocer porqué acabará en el olvido de los dos. No me interesa con quien andes, porque estoy decidido a reencontrarte. Estoy predestinado a vivir por ti. Por esto, algún día nos cruzaremos y, quieras o no, nos fundiremos en un beso completamente nuevo, completamente distinto a los de aquel entonces, cuando todavía no sabíamos lo que queríamos.
sábado, 22 de octubre de 2011
#05 - ¿Otra vez?
Ella me mira. Es una mirada corta, pero intensa. Tan intensa, que me ha parecido que nos hemos estado mirando a los ojos durante horas. Me gustan sus ojos. Podría mantener mi mirada con la suya unas infinitas horas más. Pero mis ojos miran en otra dirección. Me acuerdo de que no estamos solos y la conversación toma otro rumbo. Luego me acuerdo también de tu sonrisa y la suya también me encanta.
No es fácil olvidar a una persona que quieres ni cuando lo deseas con toda tu alma. Para olvidarte, sólo he necesitado una cosa: tiempo. En este tiempo he sufrido mucho más de lo que puedas creer, seguro que más de lo que sufrirás tu en el resto de tu vida. Parece que al fin lo consigo, que puede empezar algo nuevo. Pero no lo veo claro. Tengo miedo a equivocarme otra vez y de volver a sufrir durante las 24 horas del día, durante los 30 días de cada mes y durante los 12 meses de cada año que he intentado quererte...
miércoles, 5 de octubre de 2011
#04 - Sin ti.
No estoy bien. Pensaba que un cambio de aires me ayudaría a convencerme de que no estoy echo para ti y que debo olvidarte. Pero la ciudad me mata. A veces creo que te veo, que me cruzo contigo por la calle pero tu pasas de mí, luego te giras, me miras, te sientas en el banco más próximo y te me quedas mirando con ésos ojos que desean besarme. Imposible. Esto es imposible. Nos separan kilómetros, millas, prados, casas, un mar... Y sé que eres incapaz de venir hasta aquí sólo para mí, cuando sé que hace tiempo que tu me has olvidado.
Dije que te esperaría, me cansé de tus mentiras pero no de ti. Es imposible dejar de pensar en ti ni en la gran ciudad. Bajo las escaleras del metro despacio, meto la tarjeta, giro el torniquete, camino, espero unos minutos, se abren las puertas, entro, me siento. Veo la gente entrar y salir, te busco y creo que te encuentro. Imposible. Salgo del metro, las escaleras mecánicas me acompañan al exterior, soy un engranare más de esta maquina llamada sociedad.
Creo que te veo. Imposible. Ahora recuerdo ésa última palabra: "adiós". Pero no me hago cargo de ella.
lunes, 16 de mayo de 2011
#03 - Lo que escribo.
Sólo tengo que mirarte para que se me pare el corazón. Sé que dices que todo lo que escribo, no son cosas que debería de escribir un chico, que parezco una pobre adolescente enamorada. Yo te contesto diciéndote que cuando uno no puede demostrar sus sentimientos, los escribe. Sabes que te quiero y que piensas que nunca estaré contigo. Pero me da igual lo que pienses, porque yo sigo escribiendo, como una pobre adolescente enamorada, lo que me pasa cuando te miro, toda esa energía positiva que me transmite una sola mirada tuya, sobre ti, que te quiero y que no necesito nada más.
sábado, 14 de mayo de 2011
#02 - Sólo.
¿Sabes que? Hoy te he visto en la terraza del bar de siempre. Llevabas el pelo recogido y ésa camiseta que te gusta tanto. Tenías las piernas cruzadas y tus manos sostenían una taza -seguramente de café con leche y sin azúcar.-
Pensaba que me habías visto, y si no ¿a qué ha venido ésa sonrisa? Sabes que no me puedo resistir a tus sonrisas, que me despiertan curiosidad, me alegran el día, y que me hacen sonreír a mí también. Siento no haberme parado a hablar contigo, tenía prisa. Prisa a desaparecer, no me gusta que me veas sólo. No sé porque, pero al fin y al cabo, siempre estoy sólo, esperándote, dónde siempre, a la hora de siempre.
domingo, 1 de mayo de 2011
#01 - Esperandote.
Muchas veces me acuerdo ti, de tus ojos, de tu pelo, de tu sonrisa... No sabría decirte cuantas veces aproximadas al día. Que son muchas, esto sin duda. Y es que no hay un solo día que no piense en ti,...
Pero necesito dejar pensar, y pasar a la acción. A partir de hoy y todos los días me vas a tener allí, sentado en ese banco, dónde el tiempo se quería parar cuando aún estabas a mi lado. Estaré esperando a que pases y sólo entonces, te abre encontrado, ya no necesitaré nada más. Porque al fin y al cabo, lo único que me hace falta es un poco de amor, de tú amor, de ti.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)